Una de las empresas que en su día recibió la adjudicación de una parcela en el polígono industrial de Olloniego, suelo subvencionado con ayudas públicas del Plan de la Minería 1998-2004 --los conocidos como fondos mineros-- y de cuya gestión se encargó la sociedad Gestión del Suelo de Oviedo, S.A. (Gesuosa), nunca llegó a crear el proyecto presentado, ni los 24 empleos previstos para la distribución de bebidas y comidas tipo snack.
La empresa en cuestión se llamaba Seprege S.L, a la que Gesuosa --sociedad creada por la alcaldía y encargada de elaborar el pliego de condiciones para regir el concurso de compraventa del suelo para el nuevo polígono-- le adjudicó en 1998 la parcela A-19, de 5.007 metros cuadrados.
La sociedad Seprege S.L. se constituyó el 2 de abril de 1992, con 500.000 pesetas de capital para prestar servicios a la tercera edad. La forman María Jesús García Rodríguez, que figura en la escritura como auxiliar de enfermería, con 40 participaciones, en total y dado que entonces aún no existía el euro, por valor de 400.000 pesetas, e Isabel Fernández (ATS), ésta con 10 participaciones y 100.000 pesetas. La administradora única es la primera, durante diez años y la dirección de la empresa coincide con su propio domicilio.
Ampliación de socios El 21 de enero de 1994 amplía el número de socios y entran a formar parte de ella Julián Álvarez González y José Luis Álvarez Álvarez. En 1998 cuando se abre la posibilidad de hacerse con terreno en el polígono de Olloniego, esta empresa presenta su proyecto. Ahora ya no se dedica a la tercera edad, sino que había cambiado su objeto social y consta como una empresa para la intermediación y realización de servicios de toda clase.
Los concursantes interesados en adquirir parcelas debían acreditar y justificar los intereses sociales, en las que se trataba por encima de todo de generar nuevos empleos ya que hay que recordar que los fondos del Plan de la Minería tenían como objetivo la dinamización de la actividad empresarial para compensar los puestos de trabajo en las zonas afectadas por el cierre de las minas.
Por ello, se exigía una memoria explicativa del proyecto, que tendría carácter contractual y vinculante, donde debía figurar los empleos a generar por el nuevo proyecto, así como las certificaciones correspondientes de hallarse el solicitante al corriente de sus obligaciones con la Hacienda Pública, con la Seguridad Social y de alta en el IAE (Impuesto de Actividades Económicas).
Seprege S.L. presentó el 14 de diciembre de 1998 un voluminoso proyecto, con una amplia documentación para ocupar una parcela de 6.150 metros cuadrados (algo más de lo que finalmente obuvo), en la que se dice pretende instalar una empresa de distribución de comida, snack y bebidas como zumos, diferentes tipos de tés o refrescos y productos energéticos.
Plantilla La empresa asegura que prevé contar con una plantilla de 24 trabajadores, entre fijos y temporales ya que explica que todo va en función de los picos de temporalidad en el consumo de este tipo de productos. Explica que 19 trabajadores pueden ser fijos a jornada completa, otro fijo a tiempo parcial, dos eventuales a jornada completa y dos eventuales a tiempo parcial.
Quiosco de prensa Para llevar a cabo todo este proyecto en Olloniego llama la atención que la representante de la empresa sigue siendo como administradora María Jesús García Rodríguez, que de profesión era auxiliar de enfermería, pero que al justificar su actividad empresarial para optar a la adjudicación de la parcela declara que tiene un quiosco de prensa y revistas, en la calle Cardenal Cienfuegos, en Oviedo.
Sin embargo, está dispuesta al pago de 30.750.000 millones de pesetas sin IVA, hay que recordar que entonces aún no existía el euro, y que se compromete a hacerlo en los siguientes plazos: El 15% a la firma del contrato, el 35% al año y el 50% restante a la firma de la escritura pública.
Mismo día del proyecto Pero, además, en la documentación que presenta para que le sea adjudicada una parcela en el suelo industrial de Olloniego hay otro punto muy llamativo. En el informe del Impuesto de Actividades Económicas (IAE) se dice que la actividad del quiosco de prensa y revistas comenzó ese mismo día, es decir, el mismo que se presenta el proyecto. Entre las exigencias para tener acceso a la adjudicación era indispensable la existencia previa de la empresa. Es más, asegura estar al corriente de las obligaciones de la Seguridad Social.
Sin embargo, en un documento del jefe de la sección de Información de la Dirección Provincial de Asturias de la Tesorería General de la Seguridad Social certifica que esa empresa no figura inscrita en el sistema de la Seguridad Social por lo que no tiene obligación de cotizar.
Adjudicación A los nueve días de presentar el proyecto, es decir, el 23 de diciembre de 1998, se le adjudica a Seprege la parcela A-19, para que desarrolle el proyecto de la empresa de distribución. Abonó 4.350.000 pesetas, IVA incluido, como anticipo a cuenta. La comunicación oficial de la adjudicación de Gesuosa a la administradora se produce el día de Nochevieja, el 31 de diciembre de 1998, en la que además Gesuosa le advierte de que no presentó certificación de corrientes de pagos con Hacienda.
http://www.lavozdeasturias.es/asturias/oviedo/empresa-recibio-suelo-Olloniego-empleo_0_392960725.html
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